Carlos Tavares: Una Voz Ineludible en la Industria Automotriz Europea
Carlos Tavares, reconocido por su influyente papel en el sector automotriz europeo durante más de diez años, ha sido una figura clave cuyas opiniones han resonado fuertemente en la industria. Como arquitecto de la fusión entre PSA y FCA, que dio lugar a la creación de Stellantis, y artífice del resurgimiento de Peugeot-Citroën, Tavares ha vuelto a la palestra pública con la presentación de su libro Un pilote au coeur de la tempête. En este contexto, ha lanzado una advertencia contundente: Europa está perdiendo competitividad mientras China avanza dentro de la industria del continente.
Un Cambio de Era en Stellantis
En una reciente entrevista con Le Point, Tavares compartió detalles sobre el abrupto final de su mandato en Stellantis. Explicó que, en una tarde de diciembre, John Elkann le comunicó que había perdido la confianza en él, lo que resultó en una salida precipitada y un prolongado silencio. Sin embargo, su regreso a la escena pública no se centra en su separación de Stellantis, sino en el panorama global. Tavares critica las decisiones que se toman «de espaldas al ritmo real del mercado» y señala que la transición hacia la movilidad eléctrica está «mal acompasada» con la demanda, lo que, según él, está debilitando a los fabricantes y las cadenas de suministro tanto en Europa como en Norteamérica.
El Impacto en España y la Atención de Aragón
Aunque Tavares evita discutir planes específicos para cada país, sus declaraciones resuenan en España, donde Stellantis opera tres plantas: Vigo, Figueruelas (Zaragoza) y Madrid. Además, la compañía ha anunciado una gigafactoría de baterías en colaboración con CATL, prevista para 2026 en las cercanías de Figueruelas. La advertencia es clara: si Europa no ajusta sus tiempos e incentivos, el coste podría ser elevado en términos de empleo, inversión y autonomía tecnológica. Aragón, como un nodo crucial en esta apuesta con la automoción y la logística como pilares, sigue de cerca esta evolución.
La «Chinificación» del Automóvil Europeo
Tavares dirige su atención hacia el avance de las marcas chinas y la efectividad real de los aranceles sobre los vehículos eléctricos importados. Describe estas medidas como «una tirita en una pierna de palo», sugiriendo que llegan tarde o son ineficaces, mientras que los fabricantes chinos ya están ensamblando en plantas europeas con una base creciente de componentes locales, lo que diluye el impacto de cualquier barrera comercial.
El término que utiliza, «chinificación», no se refiere a una invasión repentina, sino a un proceso gradual y silencioso que incluye alianzas, adquisiciones de capacidad de fabricación, ingeniería compartida y cadenas de suministro que se reconfiguran. Tavares advierte que Europa corre el riesgo de perder su identidad industrial si su estrategia se limita a intentar contener el avance en lugar de aumentar la productividad, agilizar permisos, reducir el coste de la energía y dirigir ayudas hacia tecnologías críticas como baterías, software y electrónica de potencia.
Stellantis, Leapmotor y el Riesgo Estratégico
El exCEO también ofrece una reflexión sobre Stellantis y su acuerdo con Leapmotor, que implica una participación del 21% y el control del 51% del negocio fuera de China. Tavares se pregunta por qué Leapmotor aceptó este acuerdo y sugiere que, si Stellantis llegara a quebrar, podrían recomprarla. Aunque no predice una bancarrota, sí advierte sobre asimetrías de poder en alianzas donde la dependencia tecnológica y de costes puede inclinar la balanza.
Tavares no se opone al vehículo eléctrico, pero cuestiona el desfase entre la ambición regulatoria y la realidad de la demanda. Con tasas de interés altas, energía costosa e infraestructuras de recarga aún irregulares, mantener los objetivos de matriculación sin alinear incentivos, producción y cadena de valor obliga a tomar «decisiones defensivas», como recortes de turnos, cambios de mix o aplazamientos de inversión. Según su visión, la política industrial debe avanzar «al compás de la economía», no dictada por un calendario.
El Futuro de Aragón en Juego
Para Aragón, las palabras de Tavares son más que una teoría. Figueruelas ha sido un sinónimo de empleo, exportación y comunidad industrial. La anunciada gigafactoría con CATL busca asegurar el salto a la electrificación y anclar nuevas capas de valor, como la química de baterías, logística fría y servicios digitales. Sin embargo, el contexto europeo será determinante para el éxito final: si los costes energéticos permanecen altos, si los permisos se prolongan o si la normativa no premia adecuadamente el contenido local y la innovación, la ventaja competitiva podría desvanecerse.




