Impacto de las Decisiones del Consejo de Ministros en el Sector Agrario Español

El reciente Consejo de Ministros ha abordado temas cruciales para el sector agrario, entre los que se incluyen la agricultura, ganadería, la Política Agraria Común (PAC), la gripe aviar, los precios de los alimentos, la dermatitis nodular bovina y la soberanía alimentaria. Fran Aísa, agrarista de La Jacetania, ha analizado las decisiones del ministro Luis Planas, advirtiendo sobre las implicaciones para Europa: “Si se reducen los fondos, se pone en juego la seguridad alimentaria de todos”.

Incremento de Precios y Gripe Aviar

El Consejo de Ministros ha dejado varios puntos de interés que afectan directamente al campo español. Según declaraciones de Fran Aísa, el precio de los huevos y otros alimentos básicos ha experimentado un aumento del 40% desde 2020. Aísa atribuye este incremento al aumento del consumo, las altas temperaturas y la reaparición de brotes de gripe aviar. “Estamos en octubre y no hace frío. Este calor anómalo ayuda a la propagación de infecciones de origen animal”, señala.

El experto destaca que el problema es tanto sanitario como estructural: “No es lo mismo tener 100.000 gallinas en 100 granjas que todas en una sola. Cuando aparece un foco, se sacrifica toda la producción, se paralizan los traslados y los precios se disparan”.

Modelo de Producción y Desafíos para los Pequeños Productores

Aísa explica que el modelo actual empuja a los ganaderos hacia grandes explotaciones o fondos de inversión, lo que deja al pequeño productor en una situación de rentabilidad decreciente. Este fenómeno plantea desafíos significativos para la sostenibilidad del sector.

Dermatitis Nodular Bovina y Medidas de Contención

El Ministerio de Agricultura también ha abordado la aparición de casos de dermatitis nodular bovina en Cataluña, una enfermedad que afecta a las reses pero no a las personas. Aísa indica que Aragón está libre de esta enfermedad, pero enfatiza la necesidad de actuar rápidamente. Se han adquirido vacunas y establecido perímetros de seguridad de 20, 40 y 60 kilómetros alrededor de los focos detectados. El agrarista asegura que el protocolo actual es “mucho más eficaz que el aplicado en su día contra la lengua azul”.

Compensaciones por Incendios

Otra medida destacada del Consejo de Ministros fue la aprobación del pago de las ayudas por los incendios antes del 31 de diciembre. “Es una buena noticia para los agricultores y ganaderos afectados. Hay miles de hectáreas dañadas en toda España y los pagos no podían demorarse más”, afirma Aísa. Estas compensaciones buscan reactivar la actividad agrícola en las áreas más afectadas por los incendios del último verano y garantizar la recuperación ambiental de los terrenos.

Reforma de la Política Agraria Común (PAC)

El aspecto más delicado para el sector agrario es la reforma de la PAC. Aísa advierte que el nuevo planteamiento europeo “recorta un 22% de los fondos actuales” y obligará a los estados a cofinanciar con recursos propios las ayudas. “Eso va a generar una desigualdad significativa entre comunidades autónomas y entre agricultores. Si ya somos lentos con los expedientes de jóvenes agricultores, con más burocracia será inviable”, denuncia.

A pesar de que el ministro Luis Planas defiende haber alcanzado una postura común con las 17 comunidades autónomas, organizaciones agrarias y cooperativas, Aísa se muestra escéptico: “Bienvenido sea si es verdad. No me lo acabo de creer, pero ojalá sea así”.

Aísa lanza una advertencia contundente: “Está claro que vamos a cambiar alimentos por armas. Y eso pone en riesgo la soberanía alimentaria europea”, subrayando que los fondos europeos deben destinarse a garantizar la seguridad alimentaria y no a recortar el apoyo a quienes producen los alimentos.

Preservación de la Soberanía Alimentaria

El mensaje final de Aísa es claro: “Hay que preservar la soberanía alimentaria. Si bajan los fondos y no se apoya al campo, lo pagaremos todos en el precio de la cesta de la compra”. El agrarista reclama una política agraria “que piense en las explotaciones familiares, en la sostenibilidad y en el relevo generacional”, recordando que “los alimentos sanos, seguros y asequibles son la base de la sociedad y de la economía”.

“Si el campo cae, caemos todos”, concluye Aísa.