Conectividad Pendiente: Un Pueblo de Huesca Sin Internet y Sin Cobertura Móvil

En pleno siglo XXI, la conectividad sigue siendo un desafío en ciertas áreas de la geografía española. Un claro ejemplo de esta situación se encuentra en la provincia de Huesca, donde el pueblo de Arro, perteneciente al municipio de Aínsa-Sobrarbe, se enfrenta a una preocupante falta de comunicación. Ubicado en la carretera N-260 en dirección a Campo, este pequeño núcleo poblacional denuncia la inseguridad que implica la ausencia de cobertura móvil.

Una Zona Afectada por la Incomunicación

El problema de conectividad no solo afecta al pueblo de Arro, que cuenta con una población de aproximadamente 40 personas, sino también a un tramo de carretera que se extiende entre Gerbe y Fuendecampo. Además, el desvío hacia el pueblo de Los Molinos, en el municipio de El Pueyo de Araguás, también se encuentra dentro de esta área sin señal. Ante esta situación, el ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe lleva ya tres años solicitando a las administraciones superiores que inviertan en solucionar este problema, considerado un “servicio básico contra la despoblación”.

Testimonios de los Afectados

José Luis Fantova, presidente de la asociación de vecinos, expresa la frustración de los residentes: “Los que vivimos aquí lo soportamos como podemos. Yo tengo una explotación ganadera, trabajo tierras, y siempre estoy aislado”. La falta de cobertura se convierte en un problema crítico en situaciones de emergencia, como lo ejemplifica un incidente ocurrido hace unos años en la cercana zona de caza de Griébal, donde un cazador sufrió un ictus y no pudo recibir ayuda a tiempo debido a la falta de comunicación con los servicios de emergencia.

Un Problema que Se Extiende

La ausencia de cobertura móvil se extiende desde Arro en un radio de diez kilómetros, afectando una parte significativa de la carretera nacional 260. Esta vía es crucial, ya que conecta la comarca de Sobrarbe con la de Ribagorza y es transitada por miles de vehículos cada año. Enrique Pueyo, alcalde de Aínsa-Sobrarbe, explica: “Desde el ayuntamiento llevamos reclamando este servicio a las administraciones superiores desde el año 2022, sin que por el momento nos hayan dado soluciones”.

La Realidad de los Vecinos

Los vecinos del área aseguran que solo en cuatro puntos muy concretos se puede encontrar una señal mínima de cobertura. La comunicación depende del teléfono fijo y del servicio de Internet en sus hogares. Sin embargo, la situación se complica cuando necesitan realizar tareas fuera de sus casas que requieren cobertura, especialmente en el sector primario. “El campo cada vez está más tecnificado, y cuando nos solicitan fotos georeferenciadas para demostrar cultivos es muy complicado”, señala Fantova.

Colaboración y Apoyo Necesario

El alcalde Pueyo también destaca la existencia de un túnel en la zona que debería contar con cobertura, pero no es así. El ayuntamiento está dispuesto a colaborar en la instalación de infraestructura necesaria si la Diputación Provincial de Huesca y el Gobierno de Aragón brindan su apoyo. “Nos hemos comunicado con diversas empresas de telefonía para que hicieran llegar la cobertura, pero al final ninguna de ellas se ha hecho cargo de la gestión. Son pocos vecinos y parece que no es rentable, pero si queremos asentar población y dar futuro a nuestros pueblos, debemos aunar esfuerzos. Es una cuestión de seguridad para cualquiera de las personas que aquí vivimos, y también para quienes nos visitan o trabajan transitando la zona a menudo”, concluye Pueyo.