La Dirección General de Tráfico (DGT): Innovaciones en Seguridad Vial
La Dirección General de Tráfico (DGT), organismo que opera bajo el Ministerio del Interior, desempeña un papel fundamental en garantizar la seguridad vial, asegurar la fluidez del tráfico y garantizar el cumplimiento de las normas establecidas.
Para cumplir con estos objetivos, la DGT no solo se dedica a controlar y sancionar infracciones, sino que también se enfoca en actualizar y probar nuevas señalizaciones. En España, ya existen más de 400 tipos de señales oficiales, además de marcas piloto y señales reguladas por ordenanzas municipales. En este contexto de constante innovación, se introduce una nueva marca vial que es importante conocer: la línea roja continua. Esta nueva señalización, que ya se puede observar en varios tramos, ha sido diseñada con el propósito de reducir la siniestralidad en las carreteras.
Qué Significa la Línea Roja Continua
La línea roja continua tiene un doble propósito: prohibir el adelantamiento y advertir sobre tramos especialmente peligrosos que presentan una alta concentración de accidentes. Esta señal no reemplaza el código de tráfico existente, sino que lo refuerza con una mayor visibilidad. Puede ser pintada entre dos líneas blancas continuas o sobre una línea blanca continua ya existente, de manera que los conductores perciban claramente que se encuentran en una zona de riesgo donde no deben invadir el carril contrario. La experiencia internacional ha demostrado que colores llamativos pueden reducir la accidentalidad en puntos críticos.
La DGT ha comenzado a implementar esta señalización en tramos piloto. Uno de los primeros lugares donde se ha introducido es la A-355 en Málaga, que conecta Marbella y Cártama/Coín, una de las vías con mayor siniestralidad en Andalucía. En este tramo, la línea roja actúa como un recordatorio intensificado de que no se debe adelantar y de que es recomendable ajustar la velocidad al riesgo del entorno. El plan de la DGT es evaluar los resultados y extender esta medida a otros tramos con altos índices de accidentes.
¿Pueden Multarte si Rebasas la Línea Roja?
La respuesta es afirmativa. Adelantar invadiendo un carril protegido por línea continua —ya sea blanca o roja— constituye una infracción grave, que conlleva una sanción de 400 euros y la pérdida de 4 puntos del permiso de conducir.
En caso de girar en una zona de línea continua, la multa habitual es de 200 euros y la pérdida de 3 puntos, dependiendo del tipo de maniobra. La línea roja no introduce un nuevo tipo de sanción; simplemente potencia la visibilidad de una prohibición ya contemplada en el Reglamento General de Circulación.
Las Excepciones que Siguen Vigentes
Al igual que con la línea blanca, existen supuestos específicos en los que se puede rebasar la línea continua, siempre con máxima prudencia:
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Adelantar a ciclistas manteniendo la distancia lateral de seguridad.
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Adelantar a ciclomotores en condiciones seguras.
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Rebasar peatones, animales o vehículos de tracción animal.
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Sortear un vehículo inmovilizado en la calzada.
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Superar obstáculos u otros elementos de la vía cuando no exista alternativa.
Estas excepciones no permiten realizar adelantamientos ordinarios en tramos donde está prohibido; se limitan a situaciones puntuales de seguridad y fluidez. En todos los casos, se debe seguir el principio de no invadir más de lo necesario el carril contrario y no poner en riesgo a otros usuarios.
Por Qué la DGT Apuesta por Esta Marca
La mayoría de los accidentes mortales ocurren en carreteras convencionales de un solo carril por sentido, donde los choques frontales por invadir el carril contrario tienen consecuencias especialmente graves.
La línea roja busca “sacudir” la percepción del conductor en estos puntos críticos: subraya que se encuentra en un tramo crítico, desincentiva maniobras imprudentes y ayuda a reducir la velocidad.
El objetivo es eliminar comportamientos de riesgo recurrentes, como los adelantamientos forzados, y mejorar la disciplina en vías con un historial negro de accidentes.




